Tomando la salida hacia Lastras de Lama, y tomando el camino agrícola, se llega a la finca (privada) con el caserón militar de tradición morisca conformado por tres cuerpos en torno a un patio del que destacan dos torreones. También hay en el mismo anejo de Lastras, una ruina romántica de lo que fue una iglesia. Quedan dos ábsides de mampostería encalada, cornisa con canecillos decorados y metopas lisas. También destaca su torre.