El castillo de Castilnovo mantiene aún envueltos en misterio sus orígenes, que algunos historiadores sitúan en el siglo VIII y otros en la época de Almanzor, en el siglo X. Su arquitectura refleja la huella de distintos estilos, desde el mudéjar hasta el isabelino, con aportaciones neoclásicas y ecos tanto del románico segoviano como del gótico. Nació como torre de vigilancia, según recogen las crónicas, y a lo largo de su historia ha albergado a personajes de renombre, entre ellos Juana I de Castilla, que habría habitado sus estancias tras la muerte de su esposo. En tiempos más recientes, el edificio se transformó en hotel, espacio para eventos y campamentos, llegando incluso a ser considerado la propiedad más cara de un destacado portal inmobiliario nacional.