La Fragua de Carrascal del Río Es la tercera vez que se pone en funcionamiento la fragua de Carrascal del Río a través del trabajo de Mauro García de Pablos, como herrero, y de Pablo de Andrés. En esta ocasión, se mostró la manera tradicional de forjar clavos, caracolas, puntas de lanzas o espirales, realizando también algunas rejas de arado. De esta manera, todos los que quisieron acompañarles pudieron disfrutar de la exposición de un trabajo convencional y del calor que este desprende. Después de su cierre definitivo en los años 60 debido al fin de la actividad del último herrero, el Ayuntamiento quiso restaurar la instalación por lo que significaba para la historia del pueblo. Por tanto, la iniciativa de volver a ponerla en funcionamiento, permite poner en valor esta actividad artesana y con ello, un posible aprovechamiento como recurso turístico.
